Thursday, August 29, 2013

Eres lo que comes


Pobre liberales, si supieran que los conservadores nos mantienen vivos hoy en día muchos ya hubieran revivido, aunque sea en cenizas, para continuar su eterna lucha sin fin.

Saturday, August 3, 2013

Infierno Lunar

Tenia días sin poder dormir bien, después de semanas de encontrarme al borde de la locura tuve que desistir de mi orgullo y visitar a un doctor para comprender mejor mi situación y me dijo cosas que ya sabia pero que tendía a ignorar constantemente, principalmente por que no tengo tiempo para preocuparme por cosas tan simples; trabajo, familia, la vida en la ciudad, cosas que ponen al hombre moderno en el ojo del huracán y que pueden ser su fin si no se controlan, estrés, el asesino silencioso.

Después de una ronda nutrida de análisis y otras semanas de continuas visitas el veredicto estaba en pie y no había manera de darla la vuelta.

Medicamento estaba en orden, para dormir, para mantener mi flujo sanguíneo a un nivel razonable, en especial la presión sistólica ya que la tenia demasiado alta, y para controlar los continuos ataques de furia que tenia día a día y que incrementaban conforme mas pasaba el tiempo, buscando desquitarme con lo primero que se me pusiera enfrente. Para ser honesto los ataques de furia eran provocaciones de los que me rodeaban, todos son estúpidos, inútiles y lentos para hacer sus tareas diarias, me desesperan y si pudiera los mataría sin pensarlo, purgar el mundo de esta gente se volvería mi tarea si no es por que son demasiados y no sobreviviría su contraataque.

Los primeros días parecieron no surtir ninguna clase de efecto, me sentía igual o peor y comenzó a desesperarme por lo que tuve que visitar al Doctor para hablar al respecto, me dijo que necesitaba tomarme las cosas con mayor calma y continuar con el medicamento al menos durante un mes para poder tomar en consideración si se requería una dosis mayor o cambiar el medicamento por otro, a esto agrego terapias continuas con un psicólogo y me advirtió que de no hacer caso a las indicaciones podría sufrir un ataque al corazón.

Casi al final de ese mismo mes percibí algunos cambios ligeros en todos los ámbitos, sentía que todo se ponía en orden, que la calma comenzaba a llegar lentamente y aunque las cosas alrededor parecían empeorar yo comenzaba a tomármelo un poco mas leve en ese sentido, decidí no mortificarme por cosas que estaban mas allá de mi control y esto termino por ayudar a dar paso al cambio efectivo de mi salud, deje que la gente cayera por su propia peso, me dedique enteramente a mi trabajo y salia y entraba a mis horas, respetaba horarios de comida y sueños al igual que los de recreación.

Durante semanas todo mejoraba, a los meses ya era un hombre nuevo, el Doctor advirtió que de igual manera el medicamento era necesario y que no recomendaba dejarlo ya que podía verse una recaída o incluso podía entrar en una depresión severa por lo que debía estar al pendiente de no perder una sola dosis, el psicólogo concurrió con esta decisión y pidió que continuara asistiendo a terapias solo para confirmar en que estado me encontraba y para analizar por otras posibles causas de futuro estrés o depresión, si es que tal cosa se podía analizar.

Continué este proceso por algunos meses mas, todo seguía en orden.

En algún momento perdí una dosis, todo por estar ocupado en asuntos de importancia y no hacer caso a las advertencias, al darme cuenta note que no había pasado nada pero de igual manera busque dosis una vez en casa por temor a caer en lo mismo otra vez.

Este hecho no fue aislado, sucedió y tome nota del tiempo que pasaba, a veces minutos, otros horas y en un caso dos días, nada, seguía normal, todo continuaba su rumbo, me sentía en la gloria y con eso entendí que el medicamento ya había tomado su efecto, era libre por fin.

Me arme de valor y deje el medicamento, todo estaba bien, continuaba mis actividades diarias como correspondían y vivía la vida a plenitud aunque esa noche todo cambio.

Llegue a la casa, cene, mire algunas noticias y procedí a dormir. A las horas desperté sudando profusamente, empapado completamente en sudor y temblando sin control con terribles dolores por todo mi cuerpo, el estomago en llamas y los costados hinchados como si algo fuera a explotar, pensé que era el apéndice pero este fluctuaba por todo mi tórax, un incesante ruido en los oídos, como si tronaran un silbato dentro de mi cabeza, un tamboreo constante que parecía penetrar por el tope y frente de mi cabeza, los ojos incapaces de adaptarse a la poca luz que me cegaba, la vista borrosa, la boca seca por completo y áspera, sin capacidad de salivar de ninguna manera y con un terrible dolor en el paladar y garganta, ese dolor era caliente y a la vez parecía como si sudase por dentro y fuera pero no podía encontrar una sola gota después de secarme con una toalla que tenia cerca de mi.

Con un esfuerzo terrible me retire de la cama y busque agua para saciar mi sed, la tarea fue difícil pero una vez logrado fue lo mas delicioso que había probado en toda mi vida, una bendición traída a mi por Dios y de la cual le agradecía eternamente. Tome un vaso de agua conmigo y lo lleve hasta mi habitación pero pare, instintivamente pare y observe hacia el balcón, abierto, las cortinas sin movimiento y la poca luz de la luna que entraba en constante cambio.

Me aproxime al exterior para tomar el fresco de la noche y observe la luna, enorme y magnifica, bronceada y en toda su gloria pero extrañamente parecía como si la oscuridad de la noche fuera a devorarla. Me quede estático en mi posición mientras observaba la luna y notaba como se formaban unos dedos alrededor de esta, nubes que pasaban casualmente, pensé, aunque no podía notar ninguna nube cercana que pudiera justificar este hecho, los alrededores en silencio, muerto, la poca luz que venia de los lados producto de las lamparas del alumbrado publico.

Lentamente la luna comenzaba a rodearse de oscuridad, esta reptaba alrededor de ella, como tentáculos, y la encerraba mas y mas de una manera muy lenta, agitándose, escurriéndose sobre esta al alejarse y acercarse, como si pulsara o se moviera de manera involuntaria. Lo siguiente que supe es que alguna clase de oscuridad había devorado a la hermosa reina del firmamento y quedaba un espacio considerablemente diminuto donde brillo un haz de rojo escarlata que me cegó de inmediato.

Con mano cubriéndome la cara trate de comprender la nueva figura de la luna, aquella luz que brillaba a todo poder, y para mi sorpresa la oscuridad pareció encerrar por un segundo a la luna por completo y después se abrió ligeramente hacia arriba y abajo, era alguna clase de ojo, pero como era posible eso, como era posible que la luna se transformara en algo tan terrible, no podía comprenderlo, tanta belleza y a la vez tanto horror.

Mi mano derecha dejo ir el vaso que tenia en mano y el sonido de impacto al quebrarse me saco de mi concentración sobre el satélite, mire al suelo y me encontré rodeado de una oscuridad parecida a la que sumía a la luna en su actual estado, me había consumido ya buena parte de las piernas y al querer moverlas me vi incapacitado para hacerlo, no sentía absolutamente nada, no dolía, no quemaba, nada, simplemente no podía mover voluntariamente las piernas y al tratar de jalarlas con los brazos sentí como si estuviera cargando algo increíblemente pesado.

Trate de gritar pero sentí algo que rodeaba mi garganta, una clase de cuerda se encontraba apretándome cada vez mas fuerte y si poco me dejaba hacer era respirar, respirar cada vez menos y sintiendo que eventualmente tendría que sumirme en el reino de los sueños si continuaba así.

Lo poco que quedaba de conciencia me indicaba que debía mirar la luna, lo hice pero me aterraba continuar en trance sobre aquel ojo que parecía juzgarme con su pupila escarlata, cada parpadeo me indicaba algo, era como un reloj, cada parpadeo un segundo, algo se aproximaba.

Finalmente la oscuridad termino por rodear todo mi cuerpo, mis esfuerzos en vano y cada vez menores, mi cuello dolía de manera terrible y al perder conocimiento un ultimo pensamiento paso por mi mente, en que estado encontrarían mi cuerpo una vez que todo esto acabara...

The Atlantean Thrones and the Valve

I can’t sleep, again. I see them all over me, figures that look like demons, human with horns of all kinds, twisted and spiraling in differ...